Vecinos de distintos barrios acumulan reclamos entorno al servicio de agua domiciliaria.
En la intersección de las calles Güemes y Maipú frentistas indicaron que hay «rotura de caños de agua que los arreglaron provisoriamente y ahora esta peor».
Como consecuencia de esta situación «en los domicilios no hay presión, recurrimos a Agua de Zárate pero nos informaron que no tienen material para hacer las reparaciones».
«Todos pagamos el ABL y ni los barrenderos pasan, cumplimos abonando los servicios pero no cumplen suministrandolos, nosotros queremos que nos escuchen» apuntaron los damnificados.
Por otro lado en barrio Bosch desde horas de la mañana de este sábado «estamos con baja presión porque hubo un problema con las bombas causado por la tensión eléctrica» explicaron los lugareños.
Ayer el intendente Osvaldo Caffaro se refirió a esta problemática y expresó su malestar ante el retiro de la empresa Aysa. «El gobierno anterior tomó la determinación de excluir a Zárate del área de cobertura de AySA y esta decisión limitó la presencia de la empresa a una guardia mínima y un laboratorio” expresó el Jefe Comunal. En ese marco detalló que “con el cambio de gobierno tenía la esperanza que AySA volviera a prestarnos su servicio pero lamentablemente no sucedió. Ahora se retira definitivamente, ni siquiera dejan la cloración del agua ni el laboratorio”.
Sin embargo Cáffaro se mostró molesto y sentenció “que nos hagan esto a los zarateños en plena pandemia es muy preocupante, es una decisión errónea y hasta tiene un grado de malicia.Estoy muy enojado con esta situación” .
Frente a este panorama el intendente anticipó “vamos a revertir una vez más con nuestros recursos” y anunció “estamos firmado un convenio con Veolia, que es una de las empresas más grandes del mundo en agua y saneamiento. Seguiremos mejorando el servicio que es tan vital para nuestra comunidad”.