A pesar de las recomendaciones sanitarias de evitar la realización de encuentros sociales con más personas de lo permitido, en barrios de Zárate se siguen desarrollando en el marco de la pandemia desatada por el Coronavirus.
El pasado fin de semana cerca de la 01:30 de la madrugada, un llamado vecinal alertó a la Dirección de Prevención Urbana (DPU) sobre una fiesta clandestina en las inmediaciones de Gallesio y Larrea. Según describieron también había personas provocando disturbios en la vía pública.
Al lugar acudieron agentes de la DPU que se entrevistaron con un hombre quien negó la existencia de una fiesta clandestina y argumentó que sólo se trataba del festejo de un cumpleaños con pocas personas.
Con el correr de las horas, los llamados de distintos vecinos continuaron llegando a la base de la DPU y se volvieron a enviar nuevos móviles para su intervención, pero a pesar del llamado de los agentes en la finca, no lograron ser atendidos.
Esa misma noche, vecinos también denunciaron la existencia de juna fiesta clandestina en calle Pacheco, entre Pasaje 1 y Almafuerte, donde también se habría producido una aglomeración de personas y música fuerte. En ese caso, si bien se solicitó la presencia policial para su intervención, al lugar no acudió ningún móviles de la fuerza.