Las autoridades sanitarias de Nación, provincia y ciudad de Buenos Aires se muestran cautas, pero preocupadas, por el aumento sostenido en los casos de COVID-19 en las últimas cinco semanas. Por esa razón piden a la población que se vacune. En la provincia de Buenos Aires, en promedio, solo el 65,32% completó el esquema de dos dosis.
Las luces de alerta por el aumento de nuevos casos a nivel país se encendieron el miércoles. Ese día, después de dos meses, el número de infectados superó los dos mil. Exactamente 2.234. En el territorio gobernado por Axel Kicillof se detectaron 811 nuevos enfermos y en el administrado por Horacio Rodríguez Larreta 345.
Al otro día, Fernán Quirós, el ministro de Salud porteño, brindó una conferencia de prensa y fue muy claro. Para evitar una tercera ola, situaciones clínicas graves y daño social, pidió “seguir vacunando”, y continuar con los cuidados personales que parecen haber caído en desuso: usar barbijo en lugares cerrados, higiene de manos y evitar aglomeraciones.
La vacunación y la inmunización en buena parte de la población se ve reflejado no solo en la cantidad de enfermos, sino en la gravedad de los casos. En la región del AMBA solo el 9% de los internados obedecen a casos de COVID-19 y el 5% en el resto de la provincia de Buenos Aires. En Ciudad de Buenos Aires el número baja al 2,7 por ciento.
Según el último trabajo epidemiológico elaborado por el ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, a cargo de Nicolás Kreplak, la inmunización que otorga la vacunación produjo un baja en la “tasa de letalidad”. Esto sucede porque los casos que ingresan a terapia intensiva son menos graves y solo un porcentaje menor de ellos necesitan respirador.
En la región del AMBA, en los últimos 14 días la tasa de letalidad fue del 0,8%; en el resto de la provincia las muertes representan el 2,1% de los pacientes; mientras que el promedio es del 1,0%. Una cifra significativamente menor al 3,0% registrado en el pico de la pandemia.
El mismo informe revela que hay municipios en el conurbano bonaerense que en las cuatro últimas semanas pasaron a ser considerados de “riesgo medio o alto” por la cantidad de infectados detectados en sus barrios. Allí aparecen La Matanza, Lomas de Zamora, Tigre, General Pueyrredón, Vicente López, General San Martín, Malvinas Argentinas, Zárate, Lanús, Pilar, Morón, Tres de Febrero , Almirante Brown, La Plata y San isidro.
Según el seguimiento que se realizó en el ministerio de Salud bonaerense, y volcado en la “Sala de Situación COVID-19″, se registraron 17 brotes de contagios en escuelas de los distritos de Vicente López, donde se contabilizaron 78 casos; en San Isidro, 39 casos; en Campana, 8 casos; en San Fernando, 31 casos; en La Plata 6 casos; en Pehuajó 17 casos; en Tres de Febrero, 14 casos; en Escobar 13 estudiantes infectados.
Estos datos, estos números, son los que observan con atención los sanitaristas que piden mayor responsabilidad a los ciudadanos para evitar contagios y la necesidad de aumentar el número de inmunizado