Un joven de 23 años que estaba bajo la lupa del FBI por sospechas de terrorismo fue detenido por la Policía Federal en Belén de Escobar acusado de “intimidación pública”. En su domicilio encontraron armas de fuego e imágenes de los autores de la masacre de Columbine, ocurrida en 1999 en Estados Unidos, donde trece personas fueron acribilladas.
La investigación se inició en abril de 2021 a raíz de un informe efectuado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI), que contenía una serie de conversaciones entre diferentes usuarios de Facebook, uno de ellos con la dirección IP de su computadora en nuestro país.
Estas conversaciones “contenían una clara tendencia hacia actos violentos, con pensamientos antisociales, radicales y extremistas, dispuestos a sacrificarse por una causa, purificar al mundo y hacer justicia en contra la sociedad, con pensamientos xenófobos”, según indicaron fuentes policiales.
Debido a esta situación, la Policía Federal Argentina le dio intervención a la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), a cargo de Horacio Azzolin.
Durante más de un año, los efectivos federales se enfocaron en identificar la IP que operaba en nuestro país, estableciendo al usuario denominado en la red como “Depressedkiller” (Asesino Deprimido). “Como cambiaba constantemente de domicilio, eso dificultaba su localización”, explicaron.
Al determinar la ubicación real del usuario, el Juzgado Federal de Primera Instancia de Campana, a cargo del juez Adrián González Charvay, ordenó el allanamiento a un domicilio ubicado en la intersección de las calles Corrientes y Colón, en la ciudad de Belén de Escobar, donde el sospechoso, llamado Pablo Nicolás Cascón, fue detenido. Estaba junto a su familia..
En su habitación, los oficiales encontraron una pistola 9 milímetros con municiones varias; una caja con 50 municiones del mismo calibre; una cuerda con nudo deslizante utilizada comúnmente para ahorcamiento y credenciales de tenencia, consumo y legítimo usuario expedidas por la ANMAC a nombre de un familiar.
“Es un lote donde hay tres casas, y este joven vive en la del fondo. El arma estaba en la vivienda del tío, no en la suya, pero se trata de propiedades de fácil acceso para todos los miembros de la familia”, explicó una fuente policial.
Los agentes federales también secuestraron una notebook, un disco externo y un teléfono celular. Eso no fue todo. Al registrar el aparato telefónico del joven, hallaron fotos suyas apuntando a cámara con el arma en posición amenazante.
Además, tenía impresas varias imágenes de Harris y Dylan Klebold, los autores de la masacre de la escuela de Columbine, ocurrida en 1999 en esa ciudad de Estados Unidos, donde murieron trece personas y los dos estudiantes de último año que cometieron el atentado, quienes se suicidaron.
En el lugar se abrió su teléfono. Se buscó el término “masacre” en el aparato, con la pantalla rajada. El término apareció en un diálogo de WhatsApp con un joven agendado como “Andrés”, que usaba como foto de perfil la imagen de Travis Bickle, el alienado taxista de Taxi Driver, interpretado por Robert de Niro.
La charla era guiada por Andrés. Cascón básicamente asentía, acompañaba en el sentimiento y hablaba de “gente marginada al extremo como nosotros”.
Si en Venezuela hubiera tiendas de armas y me sacara un permiso para poder usar una, cometería una masacre y luego me suicidaría”, dice Andrés.
El joven de Escobar le responde: “Yo igual”.
Trascendió que Cascón posee antecedentes psiquiátricos y que años atrás realizó un tratamiento prolongado con medicación en una institución de Escobar. Por lo pronto, ahora se encuentra a disposición de la Justicia Federal, al igual que los elementos secuestrados.
En las próximas horas se le practicará un examen mental obligatorio para determinar su imputabilidad, como así también si resulta peligroso para sí o para terceros. De esta manera se sabrá si se encuentra en condiciones de atravesar un proceso penal y de ser indagado.
Con información de: El Día de Escobar