En Córdoba, frente a más de 400 delegados, en el marco de los Congresos Regionales con los que se propuso recorrer el país, el dirigente metalúrgico, Abel Furlán, fue contundente respecto a su postura sobre la medida que dejó trascender el Ministro Massa, y es resistida por varios sectores del movimiento obrero.
Diferenciándose claramente del sector de “los gordos” que rechaza la medida, como del moyanismo que la acepta sin reparos, Furlán sostuvo con precisión: “Fuimos una de las voces más fuertes en el reclamo al gobierno para que intervenga en la puja distributiva. No lo hacíamos como un capricho, sino con plena conciencia sobre los datos productivos: La industria metalúrgica, en todas sus ramas, creció. En algunas, de manera exponencial cómo por ejemplo el acero laminado o la fabricación de maquinaria agrícola y bienes de capital en general; en otras, recuperando niveles muy aceptables de producción y todas, absolutamente todas, en niveles superiores no solo de la pandemia, sino de todo el periodo anti industrial macrista”, ante la atenta mirada de los trabajadores”.
A su vez, afirmó que “en el mismo periodo en el que las empresas crecieron, porque los trabajadores produjeron más, el salario perdió entre 10 y 15 puntos de poder adquisitivo. En algún lugar del proceso entre la producción y el trabajo alguien se quedó con lo nuestro. Con una porción que es de los trabajadores, y al bolsillo no llegó”.
Entonces, el Secretario General de los metalúrgicos, puso condiciones: si el gobierno toma la decisión de intervenir en esta puja distributiva, “sin condicionar las paritarias, sin sumas a cuenta de futuros aumentos, ni sumas que se absorban de ninguna forma, con el solo objetivo de devolvernos algo del poder adquisitivo que perdimos, entonces definitivamente habremos sido escuchados”.
Por último, Abel Furlán reafirmó su posición: “es necesario que se otorgue una suma fija para recuperar el poder adquisitivo, y paritarias libres y de revisión permanente, para transitar el proceso inflacionario que estamos viviendo defiendo lo que ya tenemos. No es una o la otra. Son las dos herramientas juntas, a la par y complementarias” concluyó.