Una de las paritarias seguida de cerca por propios y extraños es la de los encargados de edificios. Obviamente porque les interesa a los trabajadores y trabajadoras del sector y porque indefectiblemente, la suba impacta en las temidas expensas, golpeando el bolsillo de los inquilinos y propietarios.
Los paritarios del Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta Horizontal (SUTERH) reabrieron la negociación salarial y llegaron a un acuerdo con una suma fija total de $134.000 que se dividió en siete cuotas, de las cuales ya cobraron los 12.000 pesos de agosto y en septiembre se repetirán otros 12.000 pesos.
La mejora, que beneficia unos 80.000 empleados y empleadas aproximadamente, continuará con los siguientes pagos:
- $ 18.000 en octubre
- $ 18.000 en noviembre
- $ 24.000 en diciembre
- $ 24.000 en enero
- $ 26.000 en febrero
El gremio conducido por el multifacético Víctor Santa María había establecido una mejora salarial del 27 por ciento para el primer tramo de la paritaria 2022-2023 que se completa con el súper bono de $130.000, cuyas cuotas se irá incorporando paulatinamente al salario. Vale recordar que ese porcentaje del 27 por ciento se abonó en dos cuotas: 15 por ciento en abril y 12 por ciento en junio, y a la que se sumaron $8.000 en marzo, como suma fija.
Si sube la inflación, reclamarán aumento
Desde el SUTERH destacaron el acuerdo, aunque consideraron que «hacemos un seguimiento sobre la evolución de precios, sobre todo de la canasta básica de alimentos, en contraposición con los aumentos salariales pactados y cómo quedan conformados los básicos» y agregaron que «si registramos un desfaje que afecte los ingresos de nuestros afiliados y afiliadas, vamos a reclamar la urgente reapertura de las paritarias».
La particularidad de la discusión salarial de los encargados de edificios es que tiene directa incidencia en el costo de las expensas, que en la mayoría de los casos son pagadas por los inquilinos. Asimismo, el sector está atravesando marcados cambios en las condiciones laborales, sobre todo en el control de ingresos y egresos a los edificios.
Los responsables de los consorcios optaron por nuevos sistemas de seguridad (en sus diferentes versiones) que si bien generan una inversión, se compensa con las horas que deben pagarle a sus empleados y empleadas, con horas extras, contratando turnos nocturnos o los «franqueros».