El juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa entra en su etapa final. Después de diez audiencias y 74 testigos, la tercera semana del debate comenzará con las declaraciones de los dos jóvenes que fueron sobreseídos en la causa, y las madres de dos de los ocho imputados. Además, se espera la palabra de tres amigos de los rugbiers, con los que intercambiaron mensajes y audios de WhatsApp después del crimen.
Hoy en los Tribunales de Dolores se realiza decimoprimera audiencia del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado a golpes en enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell.
Durante esta jornada declararán Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, los rugbiers que fueron sobreseídos. Además de ellos, brindarán sus testimonios Tomás Colazo (el famoso rugbier “número 11″) y las madres de Máximo Thomsen y Blas Cinalli.
Las declaraciones de Guarino y Milanesi serán cruciales, ya que estuvieron presentes en Le Brique. Ambos presenciaron todo lo ocurrido aquella madrugada: cuando sacaron al grupo del boliche, cuando los imputados se fueron a la quinta y cuando fueron arrestados.
Los acusados del crimen de Báez Sosa llegaron a las 7:45 a los Tribunales de Dolores para la audiencia número once del proceso en su contra bajo el usual operativo de seguridad del SPB.
Juan Guarino, que estaba entre los acusados originales y fue sobreseído por falta de pruebas, apareció en la entrada de los tribunales poco después de las 8:30. “Vengo a ayudar”, aseguró a la prensa. “¿A tus amigos o a la Justicia?”, le repreguntó un cronista presente.
Guarino respondió: “A la Justicia”.
“Justicia por Fernando”, dijo luego.
A las 8:45, arribó el defensor Hugo Tomei.
A las 9 AM, arribó María Paula Cinalli, madre de Blas, hermana de María Elena Cinalli, madre de Ciro y Luciano Pertossi, testigo en el juicio.