Un amante de la pesca extrajo de las profundidades de río Paraná, una raya gigante, del tamaño superior a los 250 kilos. “Tenía anzuelo para tiburón e hilo de bordeadora”, comentó el pescador.
Andrés Wilchen vive en la zona oeste de Rosario y se define como un hombre de río. Comenzó a pescar a los 5 años gracias a un primo y hoy es su forma de vida.
El miércoles por la noche, mientras la luz de la luna llena brillaba sobre las aguas calmas del río Paraná, Wilchen, un experto pescador de la zona oeste, extraía de las profundidades una raya gigante de un tamaño superior a los 250 kilos para transformarla en un hito sin precedentes en su rica y fructífera trayectoria como hombre de río. «Saqué muchos ejemplares grandes, pero esta es la de mayor porte que me tocó pescar», se enorgullece Wilchen (42 años), quien tuvo que apelar a encarnar con una anguila en un anzuelo, caña y reel para tiburones y una tanza de tal grosor como el que se utiliza para desmalezar con bordeadora. Fueron dos horas de lucha intensa para extraer al ejemplar y para ello contó con la ayuda de su amigo Ariel Font, otro viejo conocedor del agua dulce.
Oriundo de la zona oeste, cuenta que el pique ocurrió pasadas las 21 mientras se encontraba con su embarcación entre Fray Luis Beltrán y San Lorenzo. A esa altura la luna llena iluminaba una noche calurosa pero apacible. Para llevar adelante su obra maestra, contó con aproximadamente 50 metros de hilo que se utiliza para bordeadoras y tuvo que transpirar más de la cuenta ante semejante esfuerzo que lo dejó prácticamente extenuado pero exultante.
«Soy amante de la pesca, es mi vida y pasión. Desde los 5 años que voy al rio», destaca Andrés para comentar: «Saqué muchos ejemplares grandes, como surubíes, patíes y rayas, pero hasta ahora esta es la de mayor porte (250 kilos)». En ese sentido, precisa: «La pesqué con una caña y un reel que es para tiburones».
Reseña además que esa intensa lucha de supervivencia del ejemplar les llevó dos horas de tire y afloje. «Estuve a punto de abandonar todo por el cansancio, también tenía anzuelo para tiburón y, lo más cómico, es que le puse hilo de bordeadora del 220 y una carnada de anguila grande», consigna para destacar que la captura contó con la ayuda de su amigo Ariel Font del grupo de pesca «Ultimo tiro».