En los últimos días el panorama desolador del cementerio municipal generó preocupación y los reclamos de los vecinos se multiplicaron. Las imágenes compartidas por distintas redes sociales evidencian actos de vandalismo a los que son sometidos las instalaciones. Piden que el Municipio refuerzo medidas de prevención y mantenimiento.
Ante este panorama, el concejo deliberante aprobó una nueva ordenanza donde solicitan al Ejecutivo Municipal “poda, mantenimiento de edificios históricos, reparación de veredas, reposición de canillas y la finalización de los sanitarios. Además de levantar aún más los tapiales, erradicar basurales internos”. Al mismo tiempo, exigen que haya más seguridad para evitar actos vandálicos y robos.
La concejal justicialista, Mónica Cabeza expresó sobre este tema que «la gente no va porque se siente insegura, y ya no quiere ir porque se encuentra con la profanación de tumbas o el robo de placas que terminan calando muy hondo en el sentimiento de los propios vecinos. Hay baños sin terminar, no existe el agua potable en todo el predio y se necesita un mantenimiento urgente de todas las instalaciones”.
La ordenanza aprobada establece que la necrópolis está en “estado de abandono y deterioro”. Cabe recordar que a instancias de ediles del Partido Justicialista, este año se declaró al Cementerio “Patrimonio Histórico, Arquitectónico y Cultural de la Ciudad.
Tal mención obliga al Ejecutivo a confeccionar un proyecto de restauración del Cementerio, que abarcará la reparación y mantenimiento de todas las bóvedas más antiguas (denominadas como área histórica), que lo requieran y que a la fecha dicha restauración no pueda llevarse a cabo por sus titulares atento la antigüedad de las mismas, no existiendo heredero que pueda hacerse cargo de dicha obligación. Además, reparar todas las veredas y calles.