En el marco de una paritaria de las más calientes hasta ahora, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) ratificó la doble jornada de paro nacional convocado para esta semana mientras el Gobierno busca evitar que el conflicto desborde al resto del sector. De momento, la medida de fuerza afectara a solo una parte de las industrias pero el temor de los empresarios es que la puja escale en los próximos días.
Según confirmaron hoy desde el gremio que conduce Abel Furlán, la rama 21 seguirá adelante con el paro previsto para mañana, miércoles 13, y el jueves 14. Afectará solamente a las empresas siderúrgicas ya que el resto de las cámaras nucleadas en torno a la llamada rama 17 continúan bajo una conciliación obligatoria con cita ya pautada en la secretaría que, por ahora, carece de nombramiento oficial al frente tras la salida de Omar Yasín.
La semana pasada, en vísperas de la primera jornada de paro en un esquema escalonado en marzo, el Gobierno dictó la conciliación obligatoria y frenó el paro convocado por la UOM. De esa manera se intentó frenar la huelga de 24 horas del miércoles 6 de marzo, aunque el gremio resolvió que solo se acataría de manera parcial.
En rigor, la resolución de la Secretaría de Trabajo no alcanzaba a la totalidad de las negociaciones paritarias del sector. Por esto, a las dos horas de decretarse la conciliación obligatoria, la UOM ratificó que llevaría adelante el paro previsto desde la medianoche del miércoles 6 de marzo en la rama siderúrgica, tal como sucedió. Es el mismo sector donde se pondrá en evidencia la falta de un acuerdo paritario durante las próximas 48 horas.
En paralelo, los negociadores de la UOM y de las cámaras de empresas metalúrgicas se verán las caras para buscar un punto de consenso el jueves 14, cuando concluya el cuarto intermedio. De momento, ninguna de las partes se atreve a dar un pronóstico.
La UOM apunta a las cámaras Adimra, Afarte, Afac, Fedehogar, Camina y Caima, en la rama 17 de la metalmecánica. Y en paralelo, a la Cámara Argentina del Acero integrada principalmente por el Grupo Techint, por la rama 21 de los siderúrgicos
Según se conoció, desde el sindicato pidieron un aumento salarial del 35% a partir de febrero y la incorporación de una cláusula gatillo para activar mes a mes en base a los datos del INDEC. La propuesta de las cámaras era otorgar un anticipo del 15% «a cuenta de futuros acuerdos» a partir del 1 de febrero, lo que fue rechazado.