El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, viajó a México para asistir a la asunción de Claudia Scheinbaum como la primera presidente mujer de México y, en la previa, se reunió con el mandatario brasileño Lula da Silva. Durante el encuentro, ambos manifestaron su “tristeza y preocupación” por el rumbo de la Argentina bajo la gestión de Javier Milei.
“Compartimos un encuentro con Lula antes de la asunción de Claudia Scheinbaum. Vemos con tristeza y preocupación que mientras Brasil y México comparten una mirada de integración regional nuestro país va en sentido contrario”, reza el mensaje que compartió Kicillof en su cuenta de X, al cual acompañó con una imagen del abrazo que compartió con Lula en suelo mexicano.
En esa línea, agregó: ‘’Desde la provincia de Buenos Aires vamos a seguir haciendo nuestro aporte para promover la cooperación internacional y el crecimiento de nuestra Patria grande”.
En su paso por México, el gobernador también encabezará la conferencia de “Perspectivas económicas posneoliberales en América Latina”, convocada por la División de Estudios Multidisciplinarios y la Tesorería de la Federación (DEM). Allí será el orador de lo que se difundió como una clase magistral ante los comentarios de la Tesorera de la Federación, Elvira Concheiro y la moderación de la Directora de la DEM – CIDE, Ruth Dávila.
La estadía en tierras mexicanas también le servirá a Kicillof para reforzar lazos con la comunidad internacional en vistas a la proyección hacia 2027, en sintonía con el discurso de varios dirigentes peronistas que impulsan su eventual candidatura presidencial. En una reciente entrevista con el programa La Pizarra en Radio 10, había dicho que le gustaría “tomar un café con López Obrador”.
La presencia de Kicillof se dio en contraposición con la decisión del presidente Milei de tomar distancia en la vinculación con el gobierno de México, luego de algunos cruces con presidente saliente de aquel país, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
En este contexto, el Gobierno libertario decidió no enviar ningún representante oficial, más allá de la presencia formal de la embajadora argentina en DF, María Gabriela Quinteros. En un gesto de cordialidad, la canciller, Diana Mondino, siguió la ceremonia de asunción de la líder mexicana desde la Embajada de ese país en Buenos Aires, junto a la embajadora mexicana Lilia Rossbach.