Una mujer de 29 años fue detenida el domingo en una estación de servicio cuando trataba de escapar del asedio policial del personal de Islas del Ibicuy, luego de haber protagonizado una huida de un control sobre la Ruta Nacional 12.
En el ingreso a la provincia de Entre Ríos, el personal que trabaja en el puesto de control sobre la autovía frenó la marcha de un automóvil Ford Ka que provenía desde Buenos Aires con dos ocupantes en su interior. Pero cuando al conductor se le requirió la documentación mínima e indispensable para circular, manifestó que no poseía ni licencia de conducir y que el vehículo estaba a nombre de su acompañante.
La chica de 29 años presentó su licencia de conducir y la cédula de pertenencia del vehículo, que si bien estaba vencida no tenía impedimentos para poder circular, pero como el que manejaba y no tenía registro era el hombre, los funcionarios le solicitaron que se dirigiera hasta la oficina donde se le iba a notificar y a realizar la infracción.
Fue dentro de esa oficina donde sucedió algo extraño. La joven les mencionó a los policías que su compañero de viaje la tenía secuestrada y en un momento dado, dejan toda la documentación, subieron nuevamente al vehículo y escaparon. Los motivos de todo esto no están muy claros, por qué decidieron hacer lo que hicieron porque más allá de la acusación que había realizado la joven sobre su acompañante, todo lo relacionado al auto quedaba en una multa por no tener licencia el conductor.
A partir de la huida, la Policía desplegó un operativo para frenar el automóvil que escapaba rumbo norte. Se le solicitó al personal que se encontraba de operativo en el km 138,5 de la Ruta 12 que frenaran la marcha del Ford Ka, pero fue un móvil que siguió el trayecto del vehículo el que halló el automóvil abandonado sobre la banquina, sin sus llaves de encendido.
La Policía realizó una investigación rápidamente para establecer a dónde se dirigían y dónde podrían estar. Finalmente, luego de unas horas se pudo localizar a la mujer en una estación de servicio de Gualeguay, donde había llegado a bordo de un Fiat Palio en donde viajaban otros cuatro amigos que la levantaron en la ruta y armaron la misma historia del supuesto secuestro. Pero lo cierto es que iban acondicionados con todo lo necesario para pasar un día de picnic en las termas.
