Las hijas de Saverio Antonio Orlando, un hombre de 95 años afiliado a PAMI, denunciaron públicamente el accionar de la Clínica Santa Clara de Zárate luego de su fallecimiento el pasado 29 de marzo. A través de una carta dirigida a las autoridades de la institución, relataron una serie de hechos que calificaron como “inhumanos” y “faltos de respeto”.
Según contaron, su padre había sido internado en dos oportunidades durante marzo, primero por un cuadro de neumonía e hipotensión arterial. Luego de una primera internación en terapia intermedia y UTI, fue dado de alta el 17 de marzo con indicación de continuar el tratamiento en su casa. Sin embargo, días después sufrió una recaída y tuvo que ser hospitalizado nuevamente el 22 de marzo.
En esta segunda internación, permaneció en la guardia de la clínica (habitación 1) hasta el día de su fallecimiento. Lo que más indignó a sus hijas fue que, a pesar de haber dejado todos los datos de contacto, nadie desde la clínica se comunicó para informarles sobre la muerte de su padre. “Nos enteramos por la cuidadora, a quien no le correspondía esa responsabilidad. Eso debieron hacerlo desde la clínica”, expresaron.
Además, contaron que al llegar al lugar, nadie del personal médico ni de enfermería se acercó a explicar lo ocurrido. “Ya lo habían retirado de la habitación junto con todas sus pertenencias, lo habían llevado al subsuelo y depositado en un cuarto que podemos definir como un trastero. Un lugar espantoso, lleno de mobiliario en desuso, con polvo, sin luz”, detallaron.
“La despedida fue apurada por personal de seguridad. Fue inhumano y falto de empatía el tratamiento que sufrimos sus hijas y su nieta. No lo merecíamos, y mucho menos nuestro padre”, escribieron con dolor.
Por último, aseguraron que decidieron hacer pública la situación para que “nunca más ninguna familia tenga que vivir algo así”, y llamaron a las autoridades de la clínica a reflexionar y mejorar la calidad de atención, tanto al paciente como a sus seres queridos.