A través del Decreto 133/24 el Ejecutivo local dispuso la demolición del edificio donde antiguamente funcionó el balneario municipal. Con el paso de los años también funcionarios los baños públicos y oficinas del municipio aunque actualmente se encuentra en completo estado de abandono y con riesgo de derrumbe. El costo del trabajo será de más de 8 millones de pesos.
Entre los argumentos el Decreto sostiene que la medida se debe tomar porque «se encuentra totalmente abandonado, sin mantenimiento y agredido en su estructura», además de que «dicha área manifiesta un importante estado de deterioro en la estructura resistente y paredes con riesgo de desmoronamiento y colapso».
Mientras que también se sostiene que «se recomienda la demolición del inmueble dado el riesgo que implica para la seguridad de las personas y que el mismo es irrecuperable o su costo de reparación resulta antieconómico».
Por tales razones, la Secretaría de Obras, Mantenimiento y Servicios Públicos solicita la contratación directa del servicio de demolición del inmueble, cotizándose tres empresas TC Obras viales y Civiles SRL, Grupo Cosema y Vailmac, seleccionando a la primera empresa con domicilio en Boulogne, partido de San Isidro. Por un monto de $ 8.000.250 a ejecutarse en un plazo de 15 días.