Un joven en estado de ebriedad ayer ingresó al sector de guardia del hospital Virgen del Carmen de Zárate.
Como en ese momentos se encontraban otros pacientes que tenían prioridad en la atención, no quiso esperar, se enojó y comenzó a golpear contra las instalaciones.
En uno de esos golpes rompió una de las ventanas e insultó también al personal médico que se encontraba en el lugar. Posteriormente se retiró enfurecido.
El hospital actualmente no dispone de personal de seguridad y los trabajadores de la salud aseguran que este tipo de situaciones de violencia se repite todas las semanas.